Los entre- espacios> y objetos abandonados en lugares precisos

Para entender el término entre –espacios, precisa cuestionar la palabra en sí espacio. Que es el espacio? Es delimitado? Es medible? Es territorio? Es mío? Es estático, o es producido por la actividad, luz o movimiento?

Los espacios, delimitados de acuerdo a características relativas, se unen entre sí, por otros vínculos; que pudieran llamarse entre-espacios, que sirven de nexo entre dos o más componentes que a su vez pueden formar o no parte de los espacios originales. En este caso, los entre- espacios no pueden existir sin los dos o más espacios determinados previamente unidos. Los límites de los mismos, son a veces evidentes y en otras ocasiones, se desdibujan lo suficiente para incluir un espacio con otro, con territorios comunes.

En la ciudad de Puebla, Pue, los entre-espacios son múltiples y cotidianos. La calle se vive como un mar de situaciones sobrepuestas, colores y capas de pintura. Por lo tanto, los límites entre espacios y momentos son difíciles de segregar entre sí. El eclecticismo inapelablemente presente, conlleva a múltiples entre-espacios que son ignorados, transitados y pisoteados. La serie propuesta: entre-espacios: objetos abandonados en lugares precisos, trata de este tema a una escala pequeña más modesta, en lugares olvidados entre grietas, puertas y sombras de las fachadas del centro histórico de la ciudad. Intenta mostrar un gesto de la población mexicana, que coloca objetos desechados ( en la mayoría de los casos basura) en posiciones poco comunes, siempre con una intención precisa de detener, o de esconder al objeto. A final de cuentas, estos objetos vistos ya colectivamente y desde una perspectiva mayor, forman parte de la estética de la urbe poblana. Objetos, efímeros, desechables y en muchas ocasiones coloridos, adornan y complementan la cerámica, ladrillo, pintura y demás elementos originales de nuestras construcciones del centro histórico patrimonio de la humanidad.